Estudiantes, educadores, familias y centros educativos celebran en La Rioja el Día Mundial de la Educación Católica con el lema “Juntos somos luz. Juntos somos más”. Este año, el fin de la jornada es reflejar el espíritu de unidad y fraternidad que caracteriza a la educación católica y transmitir a toda la sociedad el poder de la educación como iluminadora del camino hacia un futuro mejor.
En representación de la Plataforma por la Libertad de Enseñanza en La Rioja, formada por Concapa, Escuelas Católicas, CECE, FEUSO y FSIE, María Jesús Sauca da las gracias a todas las personas que hacen posible la educación católica en nuestra región: “Gracias a las familias por confiar en nuestro proyecto educativo y pastoral y encomendarnos algo tan importante como la educación de sus hijos. Gracias a los docentes y al personal de administración y servicios por hacer suyo nuestro modelo de formación integral y convertirlo en realidad a diario. Gracias a los estudiantes por esforzarse y ser nuestra esperanza”.
Asimismo, la presidenta de Escuelas Católicas La Rioja reivindica el papel de la escuela católica en la actualidad: “En estos momentos de desencuentro, de falta de compromiso, de luchas ideológicas y de egos mal entendidos, la escuela católica aporta sus valores éticos y morales, la compasión y la solidaridad, la enseñanza de la importancia de la justicia social y la equidad, y la necesidad imperiosa de tolerancia y paz”.
Por estos valores y otras cualidades como la educación integral, la excelencia educativa y personal, la innovación continua del claustro, el reconocimiento de la diversidad y la comunicación fluida con las familias, desde la Plataforma ponen hoy en relieve a la educación católica, recuerdan los beneficios que aporta la complementariedad de la educación pública y concertada, e inciden en la importancia de que las familias puedan elegir en libertad y tengan garantizada la enseñanza gratuita, en la red que elijan, desde los cero a los 18 años.
Además, recuerdan que la presencia de la Iglesia en la educación riojana va más allá de la red de centros católicos sostenidos total o parcialmente con fondos públicos. “La educación católica está muy presente en La Rioja y es accesible para todas las edades y diferentes grupos sociales, desde para bebés de cero años en los centros de educación infantil hasta para personas en situación de desempleo con ofertas de formación no reglada”, señala María Jesús Sauca.
Todo ello pone de manifiesto el compromiso de la educación católica con la sociedad y su apuesta por colaborar en la construcción de un mundo más solidario, equitativo y sostenible. “Los diferentes colectivos que formamos la educación católica esperamos que este Día sirva para que la ciudadanía conozca nuestro compromiso y a una escuela católica que es alegría, es compartir y es unión”, destaca la portavoz.
Pacto Educativo Global
El Día Mundial de la Educación Católica, que se celebra todos los años el Día de la Ascensión, nació por iniciativa del papa Francisco como otra acción para llevar a la práctica el Pacto Educativo Global.
El papa Francisco convoca a este Pacto a todas las personas, entidades e instituciones que quieran unir esfuerzos para realizar una transformación cultural profunda, integral y a largo plazo a través de la educación. Para ello propone cinco ejes temáticos sobre los que reflexionar y construir una sociedad más humana y más justa: dignidad y derechos humanos; fraternidad y cooperación; tecnología y ecología integral; educación y promoción de la paz y la ciudadanía; y cultura y religiones.