Este curso 2024-2025 el número de seminaristas ha vuelto a superar el millar, así, el total de seminaristas con los que cuentan las diócesis españolas es de 1.036.
El total de nuevos ingresos con los que se cuenta en las diócesis españolas para el curso 2024-2025 asciende a la cantidad de 239 seminaristas.
86 seminarista han abandonado el proceso formativo hacia el sacerdocio ordenado, 20 menos que el curso anterior.
El curso pasado se ordenaron 69 nuevos diáconos y 85 nuevos sacerdotes.
La edad de los seminaristas españoles oscila entre los 25 y 31 años.
Cada uno de los seminaristas se convierte en un verdadero milagro y signo de la intervención de Dios en nuestra historia
Este curso 2024-2025 el número de seminaristas ha vuelto a superar el millar, tras el descenso producido desde el curso 2021-2022. En concreto, el total de seminaristas con los que cuentan las diócesis españolas es de 1.036, frente a los 956 del año pasado, según los datos que este viernes, 13 de diciembre, hace públicos la Subcomisión Episcopal para los Seminarios.
El total de seminaristas que se forman en España asciende a 1.139
Al número total de seminaristas habría que añadir también las cifras de otros centros de formación sacerdotal que, aunque sus seminaristas van a regresar a sus países de origen cuando terminen sus estudios teológicos, sin embargo, su formación la desarrollan en algunas instituciones españolas. Así, el total de seminaristas que se forman en España asciende a 1.139.
De los 1.036 seminaristas que sí permanecerán en las diócesis españolas cuando sean ordenados sacerdotes, 825 pertenecen a los seminarios conciliares (que son los seminarios de las propias diócesis); mientras que 211 se forman en los seminarios misioneros internacionales llamados “Redemptoris Mater”, pertenecientes al Camino Neocatecumenal, pero erigidos canónicamente en las diócesis donde se encuentran presentes.
Por otra parte, este poco más del millar de seminaristas están distribuido entre 67 seminarios conciliares y 14 seminarios “Redemptoris Mater”, algunos de los cuales, a su vez, se encuentran agrupados entre sí, resultando un total de 56 comunidades formativas, de las cuales 25 están compuestas sólo por un seminario conciliar; 13 están formadas por varios seminarios que se han unido en una sola comunidad; también 13 son seminarios “Redemptoris Mater” con una comunidad perteneciente a una sola diócesis; 1 comunidad formativa reúne los seminarios “Redemptoris Mater” de dos diócesis (Madrid y Alcalá de Henares); y 2 seminarios están erigidos canónicamente como interdiocesanos (Cataluña y Santiago de Compostela), agrupando en cada uno de ellos a los seminaristas procedentes de varias diócesis. A esto hay que añadir otras 2 comunidades formativas existentes en España (Barcelona y Madrid) que acogen a los seminaristas de varias diócesis que se encuentran en la etapa propedéutica, que es la etapa inicial del seminario.
239 seminaristas nuevos en los seminarios españoles
El total de nuevos ingresos con los que se cuenta en las diócesis españolas para el curso 2024-2025 asciende a la cantidad de 239 seminaristas (el curso anterior fueron 177), de los cuales, 59 pertenecen a los seminarios del Camino Neocatecumenal, y 180 a los seminarios conciliares. En contraposición, el presente curso se ha iniciado con 86 seminaristas menos, que han abandonado el proceso formativo hacia el sacerdocio ordenado; 69 de los cuales pertenecen a los seminarios conciliares y 17 a los “Redemptoris Mater”. En cambio, el número de abandonos totales el curso anterior era de 106 jóvenes, es decir, 20 más que en el presente año.
Finalmente, el número de ordenaciones que se han celebrado en las diócesis de España durante el curso pasado suma un total de 69 nuevos diáconos -contabilizados en las cifras totales de seminaristas que se ofrecen- y 85 nuevos sacerdotes, los cuales dejan de depender del proceso formativo del seminario para incorporarse al presbiterio de cada diócesis. Finalmente, el promedio de edad de los seminaristas españoles oscila entre los 25 y 31 años, dependiendo de la etapa formativa en la que se encuentren. En el curso 2022-2023 fueron 41 los diáconos ordenados y 79 los nuevos sacerdotes.
Curso 2024-2025
Seminaristas: 1.036
Ingresos: 239
Ordenados: 85
Curso 2023-2024
Seminaristas: 956
Ingresos: 177
Ordenados: 79
Más razones para la esperanza
Aunque es muy difícil interpretar los datos generales de los seminaristas de toda España, puesto que habría que ir diócesis por diócesis analizando cada caso, sin embargo, hay tres factores fundamentales que muy probablemente influyen en el resultado de los datos este año.
El primer factor es la revitalización de toda la pastoral de la Iglesia y, más en concreto de la pastoral juvenil y vocacional, después del parón de la pandemia. Hay que tener en cuenta que los resultados de la pastoral vocacional no son inmediatos, sino que empiezan a verse a medio o largo plazo. Tres años después de reiniciar completamente la vida pastoral en las diócesis tras la pandemia, ahora se empiezan a percibir los primeros frutos pastorales de estos últimos años.
Por otra parte, en el verano del 2023 se celebró en Lisboa la Jornada Mundial de la Juventud, en la que participaron alrededor de 100.000 jóvenes españoles. Estos acontecimientos eclesiales extraordinarios también suelen despertar en algunos chicos una inquietud vocacional hacia el sacerdocio que, cuando es oportunamente acompañada, puede implicar la entrada en el Seminario Mayor. De hecho, esta es la experiencia de algunas de las diócesis españolas este año que han contado con nuevos seminaristas.
En cualquier caso, como factor principal, es preciso afirmar que, yendo más allá de los números y de los datos, es imprescindible hacer una lectura creyente de esta realidad, a partir de la certeza de que Dios sigue cumpliendo su promesa de darnos pastores según su corazón (cf. Jer 3, 15). Efectivamente, el Señor sigue llamando a jóvenes que quieren seguirlo desde el sacerdocio ministerial, para ofrecer a los hombres y mujeres de nuestro tiempo la buena noticia del Evangelio de Jesucristo. En medio de una sociedad en la que se ha perdido de vista la dimensión vocacional del ser humano, cada uno de los seminaristas se convierte en un verdadero milagro y signo de la intervención de Dios en nuestra historia. Por ello, a la luz del Jubileo que vamos a estrenar en la próxima Nochebuena, y del Congreso de las Vocaciones que viviremos en febrero, en la Iglesia española podemos encontrar 1.039 razones más para la esperanza.