Tras la caída de la torre de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Viguera el pasado 23 de febrero, el templo ha permanecido clausurado por precaución.
Durante este tiempo, la estructura del templo ha sido estudiada por los técnicos, quienes han determinado que no hay riesgo en el uso del interior de la iglesia, por lo que a partir del Domingo de Ramos se reabrirá al culto.
No obstante, seguirán vigilando y velando por la seguridad del edificio, toda vez que la acción del agua y los asientos de terreno pueden volver a hacer daño, si bien los testigos efectuados permanecen intactos a fecha de hoy.
En relación con las causas de la caída de la torre, los técnicos continúan elaborando los informes definitivos a la espera de las conclusiones finales.